Pastel de espinaca caseosa

Esta sabrosa espinaca se enriquece con queso crema , queso cheddar y huevos. Los bits de tocino son opcionales pero agregan otra dimensión de sabor. Puede sustituir 1 cucharada de espinaca congelada descongelada por espinacas frescas, pero asegúrese de exprimir toda el agua o la tarta no se configurará correctamente.

Al igual que la quiche, la tarta se puede servir caliente o a temperatura ambiente. ¡Es igual de sabroso en ambos sentidos!

Lo que necesitarás

Como hacerlo

  1. Saltee suavemente las cebollas dulces en la mantequilla en una sartén grande y profunda hasta que estén translúcidas. Agregue picada y revuelva constantemente hasta que la espinaca haya liberado su agua y se haya derrumbado. Retírelo del calor.
  2. Cubra un colador con estopilla y vierta la mezcla de espinacas. Tire de las esquinas de la estopilla y gírelo para expulsar toda el agua. Dejar enfriar a temperatura ambiente.
  3. Precalentar el horno a 375 F.
  4. Batir el queso crema con leche, jugo de limón, mostaza seca, sal, cebolla en polvo, pimienta y nuez moscada. Agregue los huevos, batiendo hasta combinarlos. Agregue la espinaca y las cebollas escurridas y media (1 taza) de queso Cheddar. Verter en la cáscara de tarta preparada, espolvorear con trocitos de tocino y hornear de 35 a 40 minutos hasta que se establezca el centro.
  1. Retire las espinacas del horno. Espolvoree el queso Cheddar restante de manera uniforme sobre la parte superior. Vuelve al horno y hornea 5 minutos adicionales hasta que el queso se derrita.
  2. Deje enfriar por 15 minutos antes de cortar. Este pastel salado es bueno caliente o a temperatura ambiente.