We Love Watermelon: Recetas para calmar la sed, fáciles para el verano

La sandía es una media fruta antigua, mitad vegetal que probablemente tuvo sus orígenes en África, (algunos creen que en el desierto de Kalahari) hace varios miles de años. Está representado en jeroglíficos egipcios de 5.000 años de antigüedad, y fue enterrado con los muertos para nutrirlos en la otra vida. La sandía está relacionada con las calabazas, la calabaza y el pepino, y tiene una corteza totalmente comestible. Rico en nutrientes antiinflamatorios, contiene más del 90% de agua y contiene abundantes electrolitos, por lo que es extremadamente hidratante cuando hace calor.

La sandía es rica en licopeno (¡más que en tomates!), Luteína, vitamina C y betacaroteno. Si puede encontrarlo, elija la sandía con semillas negras, que son ricas en minerales y contienen una gran cantidad de proteínas, zinc y selenio. La sandía ayuda a aliviar el hígado y los riñones de la carga tóxica y elimina los desechos de nuestros sistemas, y se enfría cuando hace mucho calor o cuando el cuerpo está demasiado caliente.

Las recetas que siguen ofrecen una variedad de formas, dulces y saladas, para comer esta maravillosa "vegefruit".