Receta de sopa de maíz y pollo Lancaster

El azafrán le da color y sabor a esta sopa de pollo casera rellena con fideos o rivels caseros y maíz. Puedes usar maíz fresco o congelado.

Esta sopa se congela bien y lo convierte en una comida copiosa y fácil entre semana unos días después de haberla hecho. Congélalo antes de agregar los fideos, cebada o rivels; preparar y agregar esos cuando recalentar la sopa.

Esta receta está tomada de "The Whole World Loves Chicken Soup" de Mimi Sheraton.

Lo que necesitarás

Como hacerlo

Hacer la sopa

  1. Coloque el pollo en una olla con suficiente agua para cubrir.
  2. Lleva a ebullición, reduce el calor y espuma descremada a medida que sube a la superficie.
  3. Cuando la espuma haya disminuido, agregue la cebolla, los granos de pimienta , la sal y el azafrán.
  4. Cocine a fuego lento suave pero constante, parcialmente cubierto, durante aproximadamente 1 1/2 horas, o hasta que esté tierno.
  5. Retire el pollo y recorte y deseche los huesos, la piel y la cebolla.
  6. Deje que la sopa se enfríe, luego quite la grasa de la superficie.
  1. Rompa la carne en trozos de cuchara y vuelva a colocarla en la sopa.
  2. Corta los granos de 4 mazorcas de maíz, luego ralla los granos de las 6 mazorcas restantes, atrapa toda la leche y la pulpa en papel de aluminio o encerado. Si está usando granos congelados, haga la mitad del puré en un procesador de alimentos o licuadora, y agregue un poco de sopa si necesita el líquido.
  3. Agregue granos enteros y maíz rallado o en puré a la sopa, junto con apio y fideos, cebada de huevo o rivels.
  4. Cocine a fuego lento hasta que el maíz y los fideos o los rivels estén cocidos. Agregue sal y pimienta blanca al gusto.
  5. Agregue el perejil y sirva, adornando cada porción con huevos picados cocidos.

Hacer los remaches

  1. Mezcle la sal y la pimienta con el huevo batido, agregue 2/3 taza de harina y bata.
  2. Siga agregando y batiendo en harina hasta que la mezcla se desmiga, pero un poco pegajosa.
  3. Frote la mezcla entre sus manos o pellizque las piezas del tamaño de un guisante y colóquelas en la sopa hirviendo a fuego lento.
  4. Cúbralo sin apretar y déjelo cocer durante aproximadamente 15 minutos, o hasta que los riveles se solidifiquen.
  5. Para hacer los riveles antes de tiempo, cocínelos en agua hirviendo ligeramente salada o en un caldo de sopa extra y luego drene y reserve; recalentar en la sopa justo antes de que se sirva.