Sopa de tomate fresco

Debe hacer esta deliciosa sopa de tomate fresco todos los veranos, usando tomates de su jardín o del mercado de agricultores. No hay nada como la sopa hecha de tomates maduros que todavía están calientes del sol. ¡No tiene nada que ver con la sopa de tomate enlatado de tu infancia!

Esta sopa también se congela bien, así que hazla en el verano, congélala en porciones de 2 o 4 tazas y disfrútala en pleno invierno. Para calentar, deje que se derrita durante la noche en la nevera, colóquelo en una cacerola y caliéntelo suavemente, revolviendo con frecuencia, hasta que la sopa alcance los 160 ° F en un termómetro para alimentos.

Sirva con algunos bollos caseros o pan de ajo tostado. Una buena ensalada verde, mezclada con champiñones en rodajas y algunos guisantes pequeños, sería una buena adición a esta simple comida.

Lo que necesitarás

Como hacerlo

1. En una sartén pesada, caliente el aceite y cocine la cebolla y el ajo hasta que estén tiernos.

2. Agregue ambos tipos de tomates, sal, pimienta y caldo, y cocine a fuego lento durante 20 minutos.

3. Cuele la sopa a través de un colador fino; descarta los sólidos.

4. En una cacerola limpia, derrita la mantequilla y agregue la harina; cocine y revuelva durante 2-3 minutos para hacer un roux para espesar la sopa.

5. Agregue 1/2 taza de la mezcla de tomate; cocine y revuelva hasta que espese.

6. Agregue la mezcla de tomate restante y cocine y revuelva con un batidor de alambre hasta que la mezcla esté caliente y ligeramente espesa.

Agregue la ralladura de naranja, la albahaca y las hojas de tomillo, y sirva.

Pautas Nutricionales (por porción)
Calorías 250
Grasa total 11 g
Grasa saturada 4 g
Grasa no saturada 6 g
Colesterol 10 mg
Sodio 496 mg
Hidratos de carbono 34 g
Fibra dietética 6 g
Proteína 7 g
(La información de nutrición en nuestras recetas se calcula utilizando una base de datos de ingredientes y se debe considerar una estimación. Los resultados individuales pueden variar).